30 enero 2010

Algo de los objetos (difícil de esclarecer)

"La creación como manifestación de mi libertad"*...

Inmerso en esta obsesión-investigación, el acto creativo es una manifestación de mi libertad. La insistencia envía un mensaje que no es fácil ignorar (más adelante (otro día) se entenderá esto).

El objeto como objetivo de subjetividad: ¡qué putas! El objeto es mi mejor pretexto.

Lo que se devora, el placer y la furia de consumir, la descarga de energía, las ansias de comer, de ingerir e introducir en el cuerpo.

El objeto ensimismado, el objeto violentado por otros (¿qué es esta personificación tan inusual de los objetos?), el objeto indefenso que no imagina su estado ni su papel y actúa sin cuestionamientos, sin señalar a la autoridad.

Un blanco plano, superficies planas sin inclinaciones donde los objetos yacen ajenos a fuerzas externas. La gravedad siempre. Y las cosas siempre en su lugar y a sus debidas distancias. El mecanismo funcionando con regularidad y fácil de accionar. Su intensidad aumenta con el tiempo y aumenta mi emoción de ver a los objetos con su mecanismo accionado cumpliendo su función a la perfección, siempre repetidamente igual como ayer.

La pintura detiene los tiempos del objeto y disipa la continuidad. Alguien la reestablecerá.



*Así decía una obra de Ebenezer Leyva González, que estuvo en la exposición celebrada en el Centro Cultural Español. Justo hace dos días la quitaron. Ahí me sentí identificado, en general me gustó. Me gusta ver al objeto quieto (pero con el mecanismo insinuado).

3 comentarios:

_ dijo...

ahh me la perdí, y quiero hablar con ustedes (mar-pabl U.) ncesito hablar de todo esto, carajo!
muy bueno, cada vez que lo veo de nuevo por acà me alegro. escriba escriba huevon.

Jose Pablo Ureña dijo...

jaja en todas... mae pongamos fecha... ya es hora ya es hora

_ dijo...

por aki le digo, tambien lo digo por correo: creo poder el jueves